Se estrena el documental sobre Chavela Vargas y estamos deseando verlo cuanto antes. Chavela ya era un mito en vida, un personaje carismático, de extremos, que nunca dejaba indiferente. Frecuentaba las cantinas mexicanas, junto a su amigo José Alfredo, tequila tras tequila, en juergas interminables que no se detenían al salir el sol. 

Una vida de leyenda

Según se cuenta, dejó el alcohol en los años ochenta, tras una intensa experiencia junto a unos chamanes. Esa es la parte de leyenda. La realidad es que fue Alicia Pérez Duarte, su pareja por aquel entonces, quien le dio un firme ultimátum. La encontró borracha como de costumbre, enseñando a su pequeño de ocho años a disparar con un revolver. Alicia no lo aguantó más y le dijo que si no dejaba el alcohol ella y el niño desaparecerían de su vida por siempre.

El documental Chavela nos muestra las luces y las sombras de esta conmovedora artista, apasionada, con una vida llena de altibajos, conquistas y amarguras. Puedes verlo en la plataforma online Filmin.

Chavela era la voz del dolor y el llanto echo canción. Sufrió mucho durante su existencia. De origen costarricense fue rechazada por sus padres y se crió con sus tíos hasta que marchó a México, un país por el que siempre había sentido fascinación.

Siempre fue una mujer a contracorriente. Vestía como un varón, llevaba pistola y fumaba y bebía como los machos mexicanos. Su poncho rojo la hacía inconfundible. Y comenzó su caída vertiginosa hacia las profundidades del alcoholismo. Como ella misma llegó a decir, no era de las de una copita, ella se tomaba toda la botella.

Por fin el documental sobre Chavela Vargas

Así mitigaba el sufrimiento de vivir en una sociedad absolutamente homófona y misógina. Aunque era vox populi, de joven nunca habló sobre su orientación sexual. Pero era una gran seductora capaz de conquistar a las mujeres de intelectuales y políticos mexicanos. Asistió a la fastuosa boda de Elisabeth Taylor y según su propio testimonio, amaneció junto a Ava Gardner.

También contó que Frida Khalo hubiese querido retenerla, pero reconoció que no podía atarla a su cama y que debía dejarla marchar. Porque Chavela entendía el amor como algo breve pero difícil de olvidar. Incluso llegó a conquistar a la esposa del propietario de la discográfica que publicaba sus discos, y fue castigada por ello. Vendió mucho pero no ella no recibió nada. El alcoholismo le llevó a retirarse durante más de una década y vivir en el más absoluto anonimato. Fue incluso dada por muerta. Hasta que resucitó y reapareció en los noventa y con el impulso de Pedro Almodóvar, comenzó a cosechar nuevos éxitos. Este reconocimiento animó a Chavela, ya anciana, a sentirse segura y reconocer con orgullo su condición de lesbiana y llegó a convertirse en abanderada de la lucha por los derechos LGBT.

Las directoras del documental sobre Chavela Vargas son Daresha Kyi y Catherine Gund y dan comienzo  a la proyección con una entrevista de la artista justo después de su larga ausencia. La vida de Chavela es sin duda una mezcla entre la realidad y la leyenda.