De nuevo tengo que traerte una noticia de las que no me gusta nada hablar, pero nada. Es más, lo odio. En esta ocasión, y como ya te he contado en otras ocasiones, se trata de la muerte de una lesbiana keniata en este país. Pero no ha sido una muerte normal, no, se trata de un asesinato precedido de una violación. 

Una lesbiana keniata asesinada y violada

El jueves pasado la policía de Karantina encontró en su casa el cadáver de Sheila Lumumba, una joven homosexual de 25 años. El hallazgo se produjo varios días después de haber sido denunciada su desaparición. Según los datos proporcionados por las autoridades, al parecer, la lesbiana keniata sufrió una agresión en la que los 6 hombres que le rompieron una pierna, la violaron posteriormente por el simple hecho de ser homosexual

Posteriormente, la activista pro- derechos humanos Njeri Wa Migwi denunció en Facebook la muerte de Sheila está muerta, simple y llanamente porque era lesbiana. Denunció que los hombres odiaban a la mujer, y, de modo general, denuncia que todos los días hay mujeres, especialmente, lesbianas, que mueren todos los días.

No es el primer ataque que sufren lesbianas en Kenia

Pues no, por desgracia. No lo es. Kenia no es, precisamente, un país muy amistoso (en concreto) con las lesbianas. Y por ese motivo, muchas organizaciones que trabajan por los derechos LGTB llevan denunciando desde hace muchos años el sistemático bloqueo de las investigaciones por parte de la policía y las autoridades de la investigación de estos crímenes de odio. 

Por su parte, medios locales afirman que la policía de Karantina ha afirmado que están inmersos en la investigación de este asesinato, y que la portavocía de la misma ha afirmado que se castigará a los culpables. Sin embargo, todo parece indicar, según los medios locales, que los violadores quedarán impunes, como ha ocurrido ya tantas veces. Para la Comisión Nacional de Derechos Humanos de Gays y Lesbianas de Kenia, esto no es algo aislado. Todas las semanas ocurre algo. 

Dicha asociación afirma que esos ataques son parte de un patrón de ataques y de una escalada de violencia contra homosexuales y personas LGTB en general en todo el país africano. Una activista muy conocida, Safina Amooti, escribió en su cuenta de Twitter que más del 64% de personas que pertenecen al colectivo han sufrido algún tipo de violencia en Kenia, y que el Jefe de Justicia debe hacer algo contra estos crímenes de odio homófobos. 

Es un problema muy grave que hay que atajar

La cuestión es que aquí hay dos problemas, no solo uno. Por un lado, el hecho de que mueran personas por razón de su identidad sexual es escandalosamente grave, y más hoy en día; por otro lado, la impasibilidad de las autoridades keniatas que hacen caso omiso de este problema es tremendamente peligroso. Para Amnistía Internacional no hay derecho a que nadie sufra estas crueldades, y Sheila tampoco tenía porqué. 

A modo ilustrativo, cabe señalar que el Tribunal Superior de Kenia rechazó impugnar el artículo 162 de su código penal que castiga las relaciones entre personas del mismo sexo con más de diez años de cárcel hace unos años. 

A mi me parece que el asesinato de esta lesbiana keniata no debería quedar impune, pero prefiero que me cuentes qué opinas tú. Dímelo en los comentarios.