Existe un estudio que asegura que solamente el 42% de las relaciones lésbicas se prolonga más de cuatro años. En realidad, es un dato que tampoco es sorprendente, aunque así de entrada pueda parecer preocupante. Es muy similar en las parejas heterosexuales. Sin embargo, los problemas a los que se enfrentan las parejas de dos mujeres son muy diferentes a los que tienen en las relaciones hetero o gais.

Las relaciones entre chicas no solo tienen que hacer frente a las dificultades propias de cualquier pareja. También tiene que enfrentarse una serie de obstáculos sociales y a veces familiares. Pero todavía hay más: las propias dinámicas de las relaciones entre mujeres. Según algunos expertos que han analizado esta cuestión a través de muchas encuestas, hay 4 factores que hacen que las relaciones lésbicas sean más complicadas.

La fusión de la pareja

Es todo un fenómeno que seguro que has observado en otras parejas formadas por mujeres. Algunas parecen gemelas desde un principio, las miras y dices, ¿quién es quién?. Otras comienzan a convertirse en el espejo de la otra con el tiempo, a vestirse de forma similar, a compartir aficiones, amigos, espacios de ocio… ¿Cuál es el problema? Básicamente que convertirse en un único ser implica perder la individualidad. Y esto, va a terminar generando mucha insatisfacción.

Verborrea

La comunicación es fundamental en la pareja, pero según el tópico, las mujeres hablamos demasiado. Si se juntan a dos mujeres en una relación, la verborrea se intensifica. ¿Esto es un poco sexista? Tal vez, pero lo cierto es que tendemos más a verbalizarlo todo. No es necesario contarlo absolutamente todo, ni sacar fuera todo lo que se nos pasa por la cabeza, ya que si multiplicamos esto por dos, puede llegar a ser agotador para las dos.

Síndrome de la cama fría

De este apagón sexual ya hemos hablado en alguna ocasión. ¿Mito o realidad? Pues depende de las personas implicadas, pero no es tan raro que con el tiempo la pasión se apague y se le dé prioridad a otras cosas. ¿Cuál es el problema? Muchas mujeres en relaciones hetero siguen intimando con sus parejas porque se sienten obligadas a ello, y no por verdadero deseo. En las relaciones lésbicas no existe esa presión patriarcal y machista, así que en realidad es una ventaja. Sin embargo, el sexo es importante para fortalecer el vínculo, así que es recomendable esforzarse un poco en mantener la llama.

El futuro

Proyectar un futuro en pareja es complicado siempre, pero en las relaciones lésbicas puede ser más oscuro aún. Es un hecho que, a nivel social y económico, las mujeres estamos en desventaja y que la presencia de un hombre, puede facilitar mucho las cosas. Quizá sea por esto que muchas mujeres bisexuales tienen mayor tendencia a elegir parejas varones. La vida hetero es mucho más fácil.

Estos son algunos retos que deben superar las relaciones lésbicas. Son obstáculos añadidos, pero no son insalvables, así que no te desanimes. Si estás en una relación y quieres a tu chica, apuesta por vosotras y seguid adelante, teniendo en cuenta los puntos que acabamos de mencionar.