Hoy te vengo a hablar de una de esas cantantes que a lo mejor no conoces porque te quedan lejos en el tiempo: Dusty Springfield. La gran Dusty. 

Dusty Springfield nació en Londres en 1939 y en realidad se llamaba Mary Isobel Catherine Bernadette O’Brien. Esta mujer dejó una huella imborrable en la música pop del momento con su voz inconfundible y su estilo único. A lo largo de su carrera, Dusty destacó como una de las artistas con más talento y más versátiles de su generación, pero también se convirtió en un símbolo para la comunidad LGTBQ, especialmente para las lesbianas.

Los inicios de la leyenda de Dusty Springfield

Desde muy pequeñita, Mary demostró que tenía pasión por la música. Tanto es así que en los años 60 se unió al trío The Springfields, donde inició su carrera. Sin embargo, Dusty Springfield consiguió el éxito como solista. Su primer hit fue I only want to be with you, y a partir de ahí las cosas empezaron a mejorar mucho en todo el mundo para ella. 

Un estilo y una presencia en el escenario únicos 

Si por algo destacaba Dusty Springfield era por su voz potente y cálida al mismo tiempo, pero también por su estilo único y por una presencia en el escenario que hipnotizaba: pelo rubio, ojos oscuros y un vestuario muy elegante la convirtieron en un icono de la moda de ese momento. La veías en el escenario (hay por ahí vídeos en YouTube si tienes curiosidad) y podías sentir la confianza. Eso la hicieron destacar aún más. 

Un éxito tras otro 

A lo largo de la década de 1960, Dusty Springfield lanzó varias canciones que se convirtieron en clásicos atemporales. Canciones como Son of a preacher man, You don’t have to say you love me y Wishin’ and hopin’ son ejemplos de la habilidad que tenía esta mujer para interpretar con emoción y captar la atención del público.

Sí, Dusty era lesbiana

Es verdad que nunca se supo mucho de la identidad sexual de Dusty Springfield y que siempre fue una persona muy discreta acerca de su vida personal, aunque en los años 70 se supo que la cantante inglesa era lesbiana. Como puedes suponer, era un momento en el que eso de la diversidad sexual no se llevaba nada, y para mucha gente fue un auténtico escándalo. La cantante jamás lo negó, y se convirtió en un referente para la comunidad de la época al desafiar las normas sociales establecidas. 

La conexión entre Dusty Springfield y la comunidad

La conexión entre Dusty Springfield y la comunidad va más allá de su identidad como lesbiana. Sus canciones, con letras a menudo llenas de emociones y experiencias universales, resonaron particularmente en aquellas personas que buscaban la aceptación y la comprensión en un mundo que a menudo era muy hostil hacia lo que hoy conocemos como diversidad (no olvidemos que en aquél momento no existía ese concepto).

Cuéntame, ¿conocías a esta cantante? Háblame de ello en los comentarios.