Ante todo, Feliz Año Nuevo, chicas. Hoy quiero hacer una pequeña reflexión en un momento en el que hay muchas nuevas posibilidades que se abren ante nosotras. Y es que, para quienes hemos tenido y tenemos que sufrir etiquetas que no hemos elegimos o que son una carga, un cambio de ciclo puede ser la oportunidad perfecta para soltar lastre, aquello que no queremos que nos defina.

Las etiquetas pesan mucho

A mí me ha pasado. A lo largo de la vida nos han atribuido etiquetas: la rara, la diferente, la marimacho o, simplemente, la lesbiana. Como si esta palabra resumiera y definiera lo que somos. Y es que la cosa es que, aunque estas etiquetas parezcan inofensivas, pueden ser un límite invisible que nos frena o nos reduce a una única faceta de toda nuestra identidad

Pero, ¿y si no queremos cargar con ese lastre? Al fin y al cabo las etiquetas son palabras que significan lo que nosotras queramos. Por eso el año nuevo puede ser buen momento para redefinirte, no desde lo que dicen o piensan o esperan los demás, sino desde lo que somos y queremos ser.

Un nuevo comienzo

Y sí, claro que sé que el año nuevo es solo un cambio de número en el calendario, pero no sé, tiene algo. Es la sensación de que se puede empezar de nuevo. Es como si tuviéramos una página en blanco para volver a escribir tu historia dejando atrás lo que ya no sirve. ¿No te pasa a ti?

Dejar atrás etiquetas no es negarte, sino controlar cómo queremos que nos definan, y lo más importante, controlar cómo nos queremos definir nosotras. Si el año pasado estuvo lleno de inseguridades o etiquetas injustas, este puede ser la oportunidad de seguir adelante. 

Redefinirnos desde lo positivo

Para ello, céntrate en lo positivo. No te dejes definir por los demás, elige palabras que de verdad te reflejen. Escoge palabras con fuerza y con energía positiva. Ya verás la gran diferencia que hay. 

No lo hagas tú sola si no quieres. Seguro que tienes mucha gente a tu alrededor que te puede echar una mano. Comparte estas reflexiones con tu círculo de confianza para tener una mejor perspectiva. 

Usa la entrada de año para crear una versión más libre de ti misma

Con esa sensación de nuevo comienzo de la que te he hablado antes, quiero hacerte una propuesta. ¿Qué tal si sueltas todo lo negativo del 2024 y miras hacia el 2025 con esperanza? Son 365 días los que tienes por delante para cargarte las etiquetas negativas. Claro, no es algo instantáneo, pero un pasito y luego otro puede hacer que seas y te sientas más libre y más feliz. 

Yo pienso hacerlo. 

En este 2025, hagámonos un regalo: el de elegir nuestras propias palabras, nuestras propias etiquetas, y construir un camino en el que nuestra identidad sea un reflejo de todo lo que somos y de todo lo que podemos llegar a ser.